Las autolesiones en la adolescencia no son lo normal, no son cosas de la edad que se van.
Son una SEÑAL GRAVE DE ALARMA.
Creer que se pasará con el tiempo es un gravísimo error, tiene graves repercusiones, lesiones emocionales y psicológicas que se mantendrán en la edad adulta.
Veo en consulta casos de este tipo y me encuentro que se le da muy poca importancia, muchos padres dice que es una simple llamada de atención. Desde el amor a los hijos, sin ser consciente de las graves repercusiones, no se actua.
¿Qué es una llamada de atención? Es una señal de que algo no va bien y requiere nuestra atención inmediata, ya, ¡ahora!
Cuando salta la alarma de incendios no espero, actuó; cuando me rompo un hueso, me quemo, tengo un accidente, no pospongo el tratamiento, actuo.
Por favor dejemos de mirar hacia otro lado ante las auto lesiones de los adolescentes y los niños. Detrás hay mucho dolor, soledad, culpa, vergüenza, humillación, abandono, etc.
La no actuación de los padres es grave, para el niño y el adolescente es vivido como un abandono, no es importante, no le importa a nadie, etc.
La adolescencia es una de las etapas de mayor riesgo de suicidio y las auto lesiones son una forma de suicidio. Es necesario llevar al hijo a un profesional.
Los adolescentes y los niños no saben expresar lo que viven internamente. Aprendemos del entorno, de nuestros padres y a menos que los padres te enseñen a expresar, te den el tiempo, el espacio para escuchar, no lo harán.
No necesitamos repetir lo que no funciona, lo que hace daño. No es necesario que el hijo/a sufra lo que la mama y/o el papa sufrio.
Lo vivirán internamente, calladamente, como un secreto inconfesable, sintiéndose solo/a; incomprendido/a; raro/a; que la vida no tiene sentido; se puede ir aislando más y más; acomplejando, etc.