Gracias Robin Williams por tantos momentos de risa, por compartir tus dones.
No se puede huir de las heridas internas, esas heridas van destruyendo a la persona.
¡Qué pena tantas personas que mueren por el dolor que llevan dentro, ese dolor que no se va, esas heridas que sangran! Y seguimos creyendo que el dinero es lo más importante, tan importante. Y siguen muriendo personas con mucho dinero y con el corazón roto.
Este artículo es de Jeff y Sue de Inglaterra (“Vision Works for life”, la visión funciona en la vida). Habla sobre lo que la muerte de Robin Williams puede enseñarnos, y es a tomar una ruta diferente a la hora de pensar y sentir, desarrollar una mayor inteligencia emocional.
Espero os guste. El texto original en inglés lo tenéis accediendo directamente a su web:
“Esta semana Robin Williams se suicido. Cada suicidio es una tragedia y una pérdida para todos aquellos que se quedan atrás.
Conforme va saliendo la historia de la última etapa de su vida parece que se enfrentó a una serie de desafíos, incluyendo la bancarrota, y con todo el éxito que tenía es difícil de imaginar que estuviera en una situación semejante.
Y cuanta más información va saliendo a la luz de su última etapa más nos damos cuenta de que miró en varias direcciones buscando una solución. Se dice que esperaba que le dieran un nuevo contrato de TV y que se anuló. Luego trato de vender su rancho, vale millones de dólares, pero no llegó a ocurrir.
Estaba tratando de resolver un problema haciendo algo; está claro que tenía la creencia de que para salir de una situación mala tenía que hacer algo. Así que, finalmente, cuando se quedó sin encontrar algo que podría hacer, lo que proporcionó el alivio a su situación fue hacer lo único que le quedaba por hacer. Y eso fue suicidarse.
Cada vez que estamos atrapados al pensar que la respuesta a cada problema es hacer algo, cada vez más, nos ponemos en peligro. Esto ocurre típicamente cuando estamos atrapados en la parte masculina de nuestra mente que rinde culto al altar de ‘hacer’. Primero hace que nuestra vida sea un trabajo duro, luego aburrido y, por último, nos mata.
El primer paso para solucionar nuestros problemas y situaciones imposibles no es hacer algo sino sentir las emociones subyacentes. Este es el primer paso para lograr un resultado positivo e inteligente.
Cada problema es un problema emocional y esto es muy difícil para la gente en sus cabezas. Lo que muchos de nosotros no nos damos cuenta es que si enterramos las emociones como el fracaso o la angustia o la supervivencia, luego, en algún momento, si no nos comprometemos con esa emoción y la transformamos, vamos a crear una situación para trae esa emoción a la superficie. Si no tenemos la madurez emocional para luego comprometernos con las emociones haremos algo que conducirá a una falta de inteligencia y a seguir patrones negativos.
Sin el femenino, sin madurez emocional, sin entender y estar dispuestos a pedir ayuda, estamos en peligro. El masculino es esencial para ayudarnos a seguir adelante, a avanzar, pero sin el femenino, nos dirigiremos hacia el acantilado más cercano.
Es esencial que entendamos este proceso o nos ponemos en peligro; ninguno de nosotros es inmune, no importa lo creativo, famoso o exitoso que seas. Podemos tomar un enfoque diferente si empezamos a bajar por un tobogán de desesperación. Robin Williams fue un genio y un talento extraordinario; en su muerte nos dio un último regalo y le honraríamos aprendiéndolo.
Con amor, Jeff y Sue”
