¿Dónde aprendes a poner tu atención? ¿Quién te enseña? ¿Cómo aprendes a concentrarte?
La atención y la concentración contribuyen a la construcción de tu identidad.
Las nuevas tecnologías nos facilitan actividades de nuestro día a día aunque es imprescindible saber usarlas en nuestro beneficio y no detrimento.
Como señala Andrés Joison, psicólogo especialista en adicción, “la adicción a las nuevas tecnologías tiene efectos en el cerebro y en la identidad de los niños” y claro en los adultos también, aunque su identidad mejor o peor ya está formada.
“El abuso de las nuevas tecnologías en los niños dificulta el proceso natural de desarrollo, de la “identidad horizontal”. Esto ocurre, en parte, por una restricción del campo visual desde un punto de vista optometrico, lo cual produce una verticalizacion del cerebro y también de la identidad.”
Cuando nacemos nuestro cerebro tiene un desarrollo aproximado de un 30% , necesitará unos 24 años para llegar a la madurez. Y ese desarrollo dependerá de las interacciones con el entorno y de cómo recibimos la ayuda o no de los adultos alrededor para integrar todas esas experiencias e información.
Es importante recordar que “la tendencia natural en los niños es a la exploración, a través del libre movimiento ocular y de la cabeza” (A. Joison).
El mejor regalo, la mejor herencia.
Moldeamos el cerebro de los menores, a grabar ciertas tendencias y descartar otras posibilidades. Y desde ahí se construye la identidad desde la infancia, desde que somos bebés.
Luego nos quejamos, ¡qué nos cuesta a los adultos asumir la responsabilidad de lo que hacemos y de lo que no!
¡Qué nos cuesta asumir las consecuencias de cómo limitamos la vida de nuestr@s hij@s, cómo limitamos sus posibilidades, su identidad, el desarrollo de su cerebro y qué alegría cuando somos parte de su desarrollo y enriquecimiento!
“La identidad es psico-biológica, el hacer va conformando un sentido de existencia en los primeros años de vida a través del movimiento exploratorio. La hiper estimulación a una edad temprana desorienta y extravía al niño, que sin el ajuste preciso de sus ritmos endogenos, pierde su orientación temporo-espacial, afectando así su imagen y su esquema corporal, esenciales en el desarrollo de la seguridad y la confianza básica, que le acompañarán durante toda su vida.” Andrés Joison psicólogo especialista en Adicciones, su libro ” De la adiccion a la autonomia”.
Cuando te preguntes qué le pasa a mi hj@ que es insegur@, no ha desarrollado una sana confianza en sí mism@, no se orienta bien, parece perdid@,….. cuando te preguntes el por qué de los síntomas no responsabilices al menor por favor, empieza a asumir responsabilidades y pide ayuda, eso te hace grande, digno de admiración. Puedes dejar de repetir las limitaciones que tú viviste, dejar de transmitir lo que no ayuda y educar de una manera sana.
Tienes mucho por aportar y aprender, pedir ayuda de un profesional dice mucho de ti bueno!
Y me gustaría cerrar este pequeño artículo con estas palabras y vídeo de
Daniel Goleman:
“Deberíamos enseñar a los niños a concentrarse en lo que quieren e ignorar las distracciones”
