Cómo acompañar a los menores desde la escuela ante el fallecimiento de un compañero o alguien de su entorno.
Es muy importante hablar de ello, poder expresar. En nuestra sociedad en general tendemos a evitar los temas de la muerte, a no hablar de ello, creyendo que con ello duele menos o no duele.
El silencio y el tiempo no curan, empeoran, encierran el dolor dentro del cuerpo.
Compartirlo ayuda, expresarlo alivia y ayuda a nuestro cerebro a poder ir integrando esa experiencia tan dolorosa, desconcertante, que genera miedo, pérdida de control, seguridad,…
Los profesores y el duelo infantil: qué hacer cuando fallece un alumno